sábado, 31 de mayo de 2008

UN ARCHIVO SOBRE LA FORAJIDA HEBE PASTOR DE BONAFINI...

La imagen corresponde al 24 de Marzo de 2006, luego del discurso que diera Néstor Kirchner en el Colegio Militar de la Nación, en El Palomar, al conmemorarse 30 años del golpe de Estado liberal de 1976. Tres años atrás, la subversiva Hebe Pastor Bonafini llamaría a Kirchner "chirolita", al tiempo que evidenció su infinito antiperonismo, algo que el traidor delincuente Néstor Kirchner no le dio importancia...

Lleno de impresentables está la mala política, que se ejerce únicamente en una sociedad fracturada, desorientada y desganada. Pero, a la vista de algunos esclarecidos, aquellos impresentables son señalados y, cuando se puede, denunciados como tales ante la sociedad que expresará asombro primero, y luego indignación.

Lamentablemente la memoria colectiva nunca fue un factor fuerte en y para las naciones en estado colonial, pero para no dejarnos vencer por esa desgraciada realidad, aquí refutamos a la falsa madre de Plaza de Mayo, Hebe Pastor de Bonafini, quien en los primeros meses del año 2003, luego de asumido Néstor Carlos Kirchner a la presidencia, ella lo criticó duramente, a tal punto de increparlo de ser "la misma basura [que Eduardo Alberto Duhalde]", entre otras cosas. Con el correr de los años, lógicamente, el eslógan de los "Derechos Humanos" subversivos comenzó a facturar y desde su cloacal boca surgieron, ya no críticas sino elogios para Néstor Kirchner.

Lo que decimos se desprende del discurso que la subversiva Hebe Pastor de Bonafini dio el jueves 8 de Mayo de 2003, en una de las habituales arengas marxistas de la organización Madres de Plaza de Mayo. Ahí va, pues, el archivo, que no le hace mal a nadie:


"Pasan tantas cosas, hay tantas cosas para decir, que cuando uno escucha, ve, lee, no sabe de dónde se va a agarrar, qué va a hablar. Cada jueves en la Plaza surgen más ideas. La gente nos pregunta por qué no votamos, por qué no vamos, si es delito, si vamos a votar en blanco...

"Las Madres no votamos porque estas elecciones de los burgueses no nos gustan. Pero suponiendo que hubiera que elegir, habría que hacerlo entre dos personas de un mismo partido. Pero a mí me parece que la gente tiene que recordar qué dijeron siempre los peronistas: que para un peronista no hay nada mejor que otro peronista. Así que votemos a quien votemos va a ser siempre lo mismo. Salieron del mismo nido. No hay diferencia, no crean que alguno es mejor.

""Chasman y Chirolita" son Duhalde y Kirchner. Uno habla y el otro repite. No es que hay gente diferente. Tenemos la misma basura. No hay una opción. Entonces, la gente puede ir o no a votar, creer que esto es democracia, sentir que si no votan no cumplen con lo que quieren, sentir que si no pone algo en la urna está traicionando. Y uno primero no tiene que traicionarse a sí mismo. Uno tiene principios y tiene bases sólidas y éticas. Y las bases éticas son no poner el voto en un lugar que está lleno de mierda.

"Las cosas se suceden muy encadenadas. Ustedes vieron lo que está pasando con Cuba, todo lo que dicen de Fidel. Y justo en el momento que Bush dice que tiene 60 países para invadir, que están atacando a la Isla permanentemente -además de tenerla bloqueada-, lo critican a Fidel porque se animó a decretar la pena de muerte para tres contrarrevolucionarios. Porque Fidel es un valiente, porque el pueblo cubano es un pueblo valiente. ¡Y no me vengan con la violencia! porque si hubiera que criticar, al primero que habría que colgar es a Bush en cualquier país de Latinoamérica. ¡Con toda la gente que mató, con todo lo que sigue matando, con todo lo que está haciendo en Irak!, ¿de qué estamos hablando?

"Lo que pasa es que a esos le faltan bolas para ni siquiera pensar en la revolución, son todos unos intelectualoides que se animan a criticar a Cuba porque nunca fueron revolucionarios, porque revolucionarios fueron nuestros hijos, y esos intelectuales que hoy critican son los que los traicionaron, los que no les gusta nada que sea medio rojo.

"Así que ¡no me jodan! ¡Fidel es un valiente y el pueblo cubano defiende la revolución porque sabe que tiene la victoria en la mano! Y uno se llena de bronca...

"El martes 13 en la Universidad de las Madres, a las 19 horas, va a haber un acto de apoyo a la decisión y la resolución del pueblo cubano. Van a estar muchos compañeros para demostrar que hay mucha gente que apoya a Cuba y que hay mucha gente que respeta las decisiones del pueblo cubano.

"Quería hablar un poco también de lo que pasó con el Herri Batasuna. Quería hablar, porque al leer lo que dice Aznar a uno le queda claro los putos negocios que hacen estos tipos. Aznar mismo dice que Bush se animó a decir que Herri Btasuna es ilegal y socio de la ETA, porque "nosotros apoyamos la guerra -dice Aznar- sin ningún tipo de problemas y la apoyamos con todo". ¡Miren los negocios que hacen estos tipos, para determinar qué pasa en otro país! ¡Pero qué tienen que meterse con los problemas de otro país! Si ellos quieren tener ese partido, que lo tengan.
De Fidel se quejan porque no tiene otro partido, a los que tienen otro partido se lo cierran, ¿pero qué carajo quieren? Quieren dominarnos, quieren mandarnos. Y uno se cansa de protestar y de gritar y de tener bronca.

"En esta Plaza, donde se habla de todo, también hay que hablar de eso, de los negocios. Qué está negociando Kirchner, qué le mandó a decir Duhalde con el ministro de economía, qué va a pasar cuando dejen sin trabajo a los empleados del Estado, porque esa es la base más caliente, lo que más está exigiendo el Fondo Monetario -que vive por acá cerca, ahí dentro de la casa de gobierno- que es reducir al mínimo la cantidad de trabajadores del Estado. Y ya les han dicho que sí.

"Y lo peor de todo es que antes de diciembre, el que entre quiere todo limpito: sin piqueteros, sin fábricas tomadas y en producción, sin fábricas ocupadas. Eso quiere el Fondo. Y otras cosas que ni sabemos, como la entrega de parte de la Patagonia, bases misilísticas, más bases de marines. Pero eso será después. Y ahora mandaron dos norteamericanos -Dios nos libre y guarde- para estudiar la cuenca del río Salado, para ver a qué lado van a tirar el agua que ellos no tienen. ¿No será también otra entrega? Ellos no tienen agua dulce como sí tenemos nosotros. Y ellos vinieron. Y ellos nunca vienen gratis. Ellos siempre, antes, se llevan algo. Hasta el jueves".

martes, 20 de mayo de 2008

EL CRIMINAL GEORGE BUSH ELOGIO LA POLITICA DE "DERECHOS HUMANOS" DEL GOBIERNO KIRCHNERISTA...¡¡BRAVO CRISTINA!!



Parece que la noticia no merecía mucha difusión, apenas algunas notas algo salteadas que salieron en la prensa gráfica. Y después, los medios audiovisuales casi lo han hecho pasar por alto. ¿Qué ocurría? Bueno, que el actual presidente de los Estados Unidos y criminal de Guerra George W. Bush salió a elogiar la parcializada política de "defensa de los DD.HH." que viene practicando en Argentina la administración Kirchner-Fernández Wilhelm.

Como era de esperar, ni lerdos ni perezosos, los medios locales pusieron manos a la obra para el ocultamiento de semejante doble acto vergonzante, porque, por un lado, el presidente George Bush hijo nada puede argumentar sobre los derechos humanos y porque, por otra parte, los supuestos "derechos humanos" que se defienden en nuestro país son únicamente los reconocidos para los delincuentes subversivos de ayer, los mismos que violaban sistemáticamente los derechos de la población argentina común y corriente en pos de una ideología internacionalista. Allí radica la doble vergüenza, digna, por otra parte, de las reglas de juego sinárquicas.

A principios del mes de abril de 2008, salieron a la luz algunas declaraciones gratificantes para el gobierno kircnerista, dado que George Bush expresó en una carta que
"elogio al Gobierno por los pasos que está ahora tomando para juzgar a numerosos oficiales que fueron previamente perdonados por abusos de derechos humanos". ¿Se habrá acordado George Bush que sobre quien hace alusión -el agente internacional Carlos Saúl Menem- fue íntimo amigo y colaborador de su padre, George Herbert Walker Bush?

El testigo presencial de este mamarracho, y a quien iba dirigida la carta, fue Héctor Timerman, ni más ni menos que ex cónsul argentino en Washington, y actual embajador local en Estados Unidos. Timerman y Bush se vieron en el Salón Oval de la Casa Blanca, donde intercambiaron mutuas alabanzas, al tiempo que el hebreo Timerman presentó las credenciales para formalmente hacerse cargo de la embajada argentina en aquél país.


Dos "prohombres" de los derechos humanos: George Bush, el admirador de la política de "derechos humanos" subversivos kirchneristas, y el sionista Henry Kissinger, uno de los principales promotores de los golpes de Estado en Hispanoamérica en los años 70 y ¡¡Premio Nobel de la Paz 1973!! Un buen consuelo para Estela Barnes de Carlotto...


En determinado momento flotó en el ambiente el nombre de un siniestro personaje ligado a los intereses sionistas en la Argentina: Jacobo Timerman, padre de Héctor. El flamante embajador le hizo entrega a Bush de un libro titulado "Preso Sin Nombre, Celda Sin Número", en idioma inglés, y cuya autoría le pertenece a Jacobo Timerman, a lo que su hijo rubricó una dedicatoria en él que afirmaba lo que sigue: "Esta es la historia de mi padre, pero también de miles en el mundo como él. Estados Unidos ayudó a mi padre, como puede ayudar a miles más"... Usted, lector, recordará la filiación del periodista y agente hebreo Jacobo Timerman en los años inmediatamente previos a la liberal dictadura militar de 1976. Veamos quién era Jacobo Timerman según escribió en su obra "El Poder en la Sombra" el despreciable y extinto Ramón Juan A. Camps, páginas 133 y 134:

"Ahora veamos la verdad. Timerman tenía vinculaciones con el financista de los montoneros David Graiver y además instigaba a la actividad subversiva desde el diario "La Opinión", donde trabajaban muchos terroristas confesos. Entre los principales colaboradores de Timerman en su diario estaban Andrés Alsina Bea, militante del ERP que intervino y fue condenado por el secuestro y asesinato del industrial italiano Sallustro; Francisco Urondo, integrante de FAR, responsable entre otros hechos del asesinato del almirante Berisso; Juan Gelman y Miguel Bonasso, del nivel superior de la conducción de montoneros; Tomás Eloy Martínez, apologista de Trelew (N. de R.: actual gran colaborador del diario "La Nación"...), y muchos más. La tendencia ideológica de los colaboradores de Timerman se reflejaba naturalmente en los artículos del diario, tanto en las secciones de política nacional, internacional, como en las secciones y suplementos culturales. El editor responsable de todo el material era el mismo Jacobo Timerman.

(…)

“Entre las acciones no relacionadas con los Graiver que Timerman confesó con orgullo, figura la fundación por él de la revista “Confirmado” para propiciar la caída del gobierno constitucional de Arturo Illia, tal como finalmente sucedió en 1966. Después de esta fecha, aparecen en “Confirmado” artículos en los que el director se vanagloria de haber propiciado y pronosticado el golpe de 1966, y de tener estrechos contactos con muchos de los militares que lo protagonizaron. En otras palabras, Timerman no creía en aquel tiempo que todos los militares argentinos fuesen “fascistas” ni sentía un respeto muy grande por el orden constitucional (…)

“Por confidencias de un periodista de su diario, Timerman supo dónde estaba secuestrado el director de Fiat, Oberdam Sallustro, pero “no consideró mportante” dar aviso a la policía. Sallustro murió asesinado por sus secuestradores. Sin embargo, el director de “La Opinión” también se presentó ante la prensa internacional como ferviente defensor de los derechos humanos. Pero para quien tiene memoria es fácil recordar que demostró muy poca preocupación por las víctimas de la subversión en el período 1971-74, y que en aquel tiempo su diario hablaba frecuentemente de “ajusticiados” cuando se refería a soldados muertos por terroristas”.


Entonces, para ver como es esto de los “derechos humanos”, el embajador Héctor Timerman reconoce que Estados Unidos ayudó a su padre, hebreo sionista íntimamente relacionado financiera y mediáticamente a la delincuencia subversiva marxista en los años 70 y que, por si esto fuera poco, también apoyó algún que otro golpe de Estado… Como se ve, es cierto, Jacobo Timerman fue un campeón de los DD.HH. de todos los tiempos…

Pero continuaron lloviendo los elogios en torno a la política de los “derechos humanos” del kirchnerismo. Tal es así que unos días después de ese amistoso intercambio de elogios entre Héctor Timerman y George Bush, éste último le envió otra carta a aquél –fechada el 15 de abril de 2008-, la cual dice así algunos de sus párrafos:


“Querido Héctor,

Primero, acabo de terminar “Prisionero Sin Nombre, Celda Sin Número”, de tu buen papá. Me tocó el coraje y el intelecto de tu papá.
(...)

Segundo, me recordó que el mal merodea y que la falla de no ver y hablar sobre alienta el sufrimiento.

(…)

Así que gracias por darme el libro y gracias por tu cálida dedicatoria”.


El periódico “La Nación” afirma en una nota del sábado 15 de Abril de 2008, que llevó por título “Otro Gesto de Bush hacia la Argentina”, que “Bush dató su carta el martes 15, apenas 6 días del encuentro que protagonizaron en el Salón Oval. Timerman le entregó sus cartas credenciales y un libro como regalo, que el mandatario republicano prometió leer”. Que, asimismo, “al parecer, [Bush] cumplió con su palabra, tal como también se lo comentó al rabino argentino Tzvi Grunbatt, ese martes, en esa misma oficina nuclear de la Casa Blanca”. El último párrafo muestra, a las claras, la internacionalización y el negocio que representan, al día de hoy, los “derechos humanos”, donde cualquiera –aún los delincuentes terroristas y sus colaboradores, como en nuestro país- se autoadjudican su defensa, donde cualquiera habla en nombre de ellos y donde los prontuarios parecen no tenerse en cuenta: “La carta presidencial [de George W. Bush] encarna el tercer gesto personal de Bush a Timerman y, por extensión, a la Argentina en apenas nueve días. Entre esta misiva y aquella presentación de credenciales con elogios, medió el encuentro con rabinos del movimiento Jabad, el 14. Bush los saludó uno por uno y al escuchar de dónde provenía Grunbatt le respondió: “¿La Argentina? Las cosas se perfilan bien allí”…

Tortura y abusos indescriptibles del ejército imperial de los Estados Unidos contra iraquíes. Héctor Timerman agradeció a George Bush el que su país haya ayudado a exiliarse a Jacobo Timerman, golpista y con lazos subversivos en Argentina, durante el liberal Proceso de Reorganización Nacional de 1976-1983.

viernes, 9 de mayo de 2008

LOS HERMANOS ABAL MEDINA: TRAGICA HISTORIA DE INTRIGAS, TRAICION Y MUERTE


Un grave error ha cometido el gobierno que desde el año 2003 se adjudicó ser "nacional y popular", "antimenemista" y "peronista", entre otros conceptos. Porque quienes lo componen no han salido de un repollo, como se dice en buen criollo. Por el contrario, no han escapado a la espiral de violencia ascendente que experimentó nuestro país en las últimas décadas, cuyo último y mayor damnificado ha sido el pueblo. Pero sin embargo, hemos vuelto a oir aquellos nombres y, lo peor, ahora de forma cambiada, modificada, engañosa a los ojos del hombre común argentino. Entre esos nombres está el de Abal Medina, muy relacionado a la pólvora y la sangre, años atrás, aunque ya casi no se habla de ello, seguramente para no comprometer a nadie. ¿Quiénes fueron Juan Manuel y Fernando Abal Medina? No nos proponemos, señores, dedicar un largo posteo sobre estos oscuros personajes, uno de los cuales murió en circunstancias dudosas y el otro, Juan Manuel, ya ha colocado un hijo suyo como asesor del gobierno de Cristina Fernández Wilhelm y, con anterioridad, en el de Néstor Carlos Kirchner. Al grano:

JUAN MANUEL, AQUEL JOVEN DEL NACIONAL BUENOS AIRES...

No eran tiempos para bromas los que vivía la Argentina inmediatamente después de los bombardeos a Plaza de Mayo en junio de 1955, como tampoco lo fueron una vez consumado el golpe de Estado liberal de la "Revolución Libertadora" tres meses más tarde. Por ese entonces, varios de los que después engrosarían las filas de la delincuencia subversiva marxista, autoadjudicándose el mote de "peronistas", estaban más que contentos porque la sinarquía internacional tiró del gobierno al Teniente General Juan Domingo Perón.


Existía, nos contó un viejo compañero de Juan Manuel Abal Medina en el Colegio Nacional Buenos Aires, un consenso bastante aceptado sobre qué postura había que tener frente a los sucesos de 1955 y posteriores: o se era 'gorila' traidor o se estaba con el pueblo de la Patria. Y 'gorilas' hubo a montones...significativamente muchos conspicuos jóvenes de buena posición -los más- que asistían al Nacional Buenos Aires.


Quien esto relata compartió aula con Juan Manuel Abal Medina, y hace unos días estuvo dispuesto a contarnos detalles interesantísimos de uno de los infiltrados de los años 70 en el Movimiento Nacional Peronista. "Juancito" Abal Medina era un cag..n, un tibio, todo lo contrario a su hermano menor, Fernando Abal Medina, quien estaba decidido a defender aquello por lo cual creía y, vale decirlo, por lo que lo mataron una noche de setiembre de 1970, aunque como más tarde veremos, fue engañado.


En el Nacional Buenos Aires, Juan Manuel se destacaba en Latín, y se granjeó la amistad del profesor de dicha lengua. Entre 1955 y 1956, y como todo estudiante que asistía al prestigioso colegio público, el joven Juan Manuel vestía de saco y, en una de las solapas, se le podía ver una insignia que llevaba una "V" y una Cruz, símbolo que significaba "Viva Cristo" o "Viva la Iglesia", en franca oposición con el peronismo. Que incluso, el ex compañero de clases recuerda que Juan Manuel Abal Medina, temeroso como era, escondía su insignia dejándola puesta o colgada del lado de adentro del saco, para que no sea vista por los demás. Sus padres lo mismo, eran antiperonistas fanáticos... Otro dato que nos daba era que Juan Manuel celebraba el derrocamiento de Perón, y que en el mismo curso del Nacional Buenos Aires, y en tiempos de la golpista "Libertadora", coexistían 'gorilas' con socialistas que trataban de imitar la vestimenta del embajador en Uruguay Alfredo Palacios. Todo esto mientras el peronismo estaba proscripto.


El que sí era bravo, nos contaba este ex compañero de clases, era Fernando Abal Medina, dos años menor que "Juancito". Y de lo que siempre había dudado nuestro informante era de la muerte prematura de Fernando, en William Morris, provincia de Buenos Aires. Por lo pronto, y antes de adentrarnos en ese episodio, hay que aclarar que Juan Manuel Abal Medina, el mediocre hombrecito veinteañeros que llegó a ser secretario general del PJ cuando gobernaba Héctor José Cámpora, era 'gorila' y, por ende, antiperonista declarado, que luego abrazó el marxismo procubano de Montoneros.


FERNANDO ABAL MEDINA Y EL SOSPECHOSO TIROTEO DE WILLIAM MORRIS EN 1970

El tema de la muerte de los primeros fundadores del grupúsculo Montoneros, que entonces se llamaba "Comando Montonero Juan José Valle", es bien siniestro y se mantiene oculto. Solamente una versión simplista y poco convincente es la que se desparrama por los pasillos cada vez que se intenta dar una explicación sobre el asunto. Intentaremos revelar algo:


Cuando los fundadores de Montoneros deciden secuestrar y asesinar al Teniente General Aramburu a finales de mayo de 1970 y principios de junio, a los delincuentes les prometieron desde la SIDE (Secretaría de Inteligencia del Estado) del gobierno del General Juan Carlos Onganía que le iban a pagar la friolera de 20.000.000 de pesos fuertes porque era un obstáculo para el desarrollo de la "Revolución Argentina" que, según Onganía, duraría 20 años. El tema discurre en que por tal crimen, a los delincuentes les adelantaron la suma de 5 millones de pesos, quedándoles adeudados los restantes 15.000.000 que, como ahora veremos, jamás le pagaron.

La promesa del pago de dicha deuda, en verdad, iba a efectuarse la noche del 7 de setiembre de 1970, o sea, unos meses después de terminado el "trabajito" (matar a Pedro Eugenio Aramburu), en la pizzería "La Rueda" que estaba ubicada en las calles Potosí y Moctezuma de William Morris, en el Gran Buenos Aires. La obra "Aramburu: el Crimen Imperfecto" de Eugenio Méndez se refiere a la zona como "con calles de tierra, mal iluminadas y casitas bajas".

Al frente del grupo de Montoneros que iba a cobrar los 15.000.000 de pesos se encontraba Fernando Abal Medina. Él junto con José Sabino Navarro y Luis Enrique Rodeiro son los que entran a la pizzería "La Rueda" y piden tres cafés. Fuera de ella, y a una distancia prudente, estaban Mario Eduardo Firmenich, en una pick-up, y Norma Arrostito junto a Norberto Rodolfo Crocco en un Dodge. Completaba la escena Gustavo Ramus que estaba aguardando dentro de un Peugeot; todos los sicarios que hicieron el 'trabajo sucio' de asesinar a Aramburu, por las dudas, estaban armados.

Dice en la página 113 de la obra "Aramburu: el Crimen Imperfecto":

"Eran las 20.10. Un poco ansiosos, miraban por la ventana. Ramus, también impecable, con traje gris, corbata marrón y camisa blanca, se mueve nerviosamente en el asiento del Peugeot. Bajo el chaleco tenía la canana con municiones. Apoyada en las piernas, la ametralladora, y a su derecha, al alcance de la mano, una valija negra para guardar el dinero. Miró preocupado el reloj y les hizo una seña a los compañeros de los otros vehículos. Se colocó un revólver en la cintura y bajó del auto, dejando la puerta semiabierta. Lentamente y tratando de no llamar la atención, ingresó en la pizzería. Se acercó a la mesa del fondo y apoyando los brazos en el respaldo de una silla preguntó en un murmullo:

"-Son las ocho y veinte, ¿qué hacemos?

"-Hay que esperar, no tenemos otra alternativa -le contestó Abal Medina".

En la Comisaría 4º de William Morris, que estaba ubicada en la calle Victoria 1231, suena el teléfono y una voz anónima le explica al oficial principal Armando Hass que "en el bar "La Rueda" acabo de ver a tres integrantes de un grupo extremista que llegaron en tres vehículos en los que hay bombas y otros materiales explosivos"... Y la voz anónima, antes de responder cómo es que sabía eso, cuelga. Los delincuentes de Montoneros no cobrarían la deuda sino que habían sido delatados. Estos datos están corroborados en la Causa 145/75, que es la que investigó -hasta que curiosamente se frenó- el secuestro y muerte de Pedro Eugenio Aramburu.

Alertados por el denunciante anónimo, desde la Comisaría 4º envían cuatro agentes a la pizzería "La Rueda", y el relato del libro que venimos citando, así lo señala:

"La brigada la formaban cuatro hombres, ya que eran sólo tres los sospechosos, según la denuncia. Fueron Roque Hernández, cabo primero y ametralladorista; Mario Bravo, cabo y chofer, con una pistola "cuarenta y cinco"; Rodolfo Carusso, cabo, con otra "cuarenta y cinco" y el oficial Armando Hass, con una Itaka.

"Recorrieron despreocupados las diez cuadras que los separaban de la pizzería "La Rueda". Detuvieron el patrullero en la esquina y Hass les ordenó a Carusso y a Hernández que bajaran. Estos cumplieron la orden y se dirigieron hacia la puerta. El chofer corrió el auto más hacia la esquina, quedando perpendicular a la puerta y entre dos árboles podados al ras, cuyos troncos estaban pintados de blanco".

Dentro de la pizzería estaba Fernando Abal Medina, Rodeiro y Sabino Navarro. Cuando Sabadinno, el dueño de "La Rueda", es interrogado por el cabo Carusso sobre si "había unos tipos raros" dentro del local, lo único que aquél atinó a decir fue "Mirá, Carusso, los únicos nuevos son aquéllos", y señaló a Abal Medina y compañía. El resto de la historia ya lo imaginarán. Al momento en que los agentes de la policía bonaerense van a pedirle los documentos, comienza una balacera infernal que hiere de muerte a Fernando Abal Medina y a Gustavo Ramus, quien éste último, por el afán de ayudar a sus compañeros de la trampa urdida, intenta arrojar una granada hacia donde estaban algunos agentes policiales pero, alcanzado por un itakazo del oficial Hass, Ramus cae al suelo al tiempo que le estalla encima de él la granada que iba a lanzar.

Ese fue el final de Fernando Abal Medina. La historia de esta traición se cerró, podría decirse, cuando en 1971 Norberto Crocco, otro de los fundadores de Montoneros bajo el auspicio implícito de la SIDE, vengó la muerte de Abal Medina y de Ramus, asesinando a quien debía pagarles los 15.000.000 de pesos restantes que nunca llegaron. Acto seguido, Crocco se suicidó, pero ese es otro tema que ahora no podrá divulgarse.

Un último dato: en un bar de Capital Federal, hace un tiempo atrás, un ex oficial del Ejército Argentino nos dijo bien clarito: "Firmenich era un agente del Ejército"...

Siendo 'gorilas' y "pseudonacionalistas", así empezaron su carrera política los hermanos Abal Medina, hoy auspiciados como "revolucionarios" por los remanentes de la subversión marxista que los aclama. ¿Lo sabía usted?