lunes, 12 de agosto de 2013

COMO ERA EL EJERCITO MONTONERO (PARTE II)



CONDUCCION DEL EJERCITO MONTONERO EN EL EXILIO

            En 1977, el Ejército Montonero seguía en pleno funcionamiento. Su máximo órgano era, como hemos dicho, el Estado Mayor del Ejército Montonero, cuya estructura abarcaba a la Comandancia en Jefe, compuesta en sus diferentes etapas por:

·         ENERO DE 1979: Comandante Mario Eduardo Firmenich; Comandante Roberto Cirilo Perdía; Comandante Raúl Clemente Yäger; Comandante Horacio Mendizábal; 2do. Comandante Fernando Vaca Narvaja, y 2do. Comandante Horacio Campiglia.

En mayo de 1977, su Estado Mayor decide lanzar el 1er. número de la publicación “Estrella Federal”, el cual se constituyó en el “Órgano Oficial del Ejército Montonero”. Destinada a ser una revista bimensual, “Estrella Federal” le brindaba al Ejército Montonero el poder cubrir diversos aspectos del mismo, como ser: la conducción, el adoctrinamiento, la información y la propaganda. En la revista, daban a conocer, con lujos de detalle, todas las operaciones que sus milicianos efectuaban en la Argentina, sean contra blancos patronales, militares, o sino en “apoyo a luchas estatales”, e incluso contabilizaban las “acciones de propaganda armada” desplegadas (lanzamiento de panfletos, puesta de carteles, volanteadas, reparto de boletines, etc., etc.).

Ese año de 1977 fue activísimo para Montoneros en términos militares. Así, de acuerdo a lo publicado por este órgano de difusión, “El Ejército Montonero, con casi 600 operaciones militares realizadas durante el 77, contribuyó en forma destacada a sostener y dar impulso al conjunto de la Resistencia popular” [1]. Quiere decir lo antedicho que, pese a que algunos sostienen que al año de producido el golpe de Estado de 1976 las organizaciones armadas ya estaban “prácticamente derrotadas”, esto no fue así, pues sino no se entiende que haya habido tantas operaciones militares como lo anuncia “Estrella Federal”.

Cuando la Conducción Nacional del Partido Montonero decidió para ese año 1979 decidió emprender la suicida ‘Contraofensiva Popular’ para el bienio 1979/1980, una resolución interna sostenía que había que “Considerar al Ejército Montonero como parte del Partido Montonero, como el aspecto del Partido estructurado al efecto del desarrollo de la lucha militar, de la preparación de la oficialidad del futuro ejército de masas y de sus estructuras centralizadas de elaboración y producción”.[2] Las acciones terroristas debían ser fomentadas por el Ejército Montonero a través de los Partes de Guerra, lo que nos habla, a las claras, que estos “jóvenes idealistas” iban en serio…

En los primeros tiempos del liberal golpe de Estado de 1976, el máximo órgano militar de la Organización Montoneros era la Secretaría Militar, cuyas funciones estaban a cargo del terrorista Horacio Mendizábal. Éste cesa en dicho cargo en mayo de 1977, cuando debe reemplazar en la Conducción Nacional del Partido Montonero al Comandante Julio Roqué, el cual había sido muerto en combate en ese último mes y año.

El Comandante Horacio Mendizábal vuelve a ser Jefe del Ejército Montonero en marzo de 1978 y hasta enero de 1979, ocasión en que se produce la fusión conjunta de la Conducción Nacional con la Comandancia en Jefe del Ejército Montonero. En cambio, la Secretaría Militar quedó como una de las 5 secretarías en que se dividía la Conducción Nacional del Partido Montonero (las restantes secretarías eran: Secretaría Política, Secretaría de Agitación, Prensa y Adoctrinamiento, Secretaría de Relaciones Exteriores y Secretaría Auxiliar de Comando). Desde marzo de 1978 y hasta enero de 1979, la Secretaría Militar funcionó bajo la jefatura del 2do. Comandante Horacio Campiglia. Y desde enero de 1979, Campiglia fue designado como miembro de la Comandancia en Jefe del Ejército Montonero y como Jefe de la Secretaría Auxiliar de Comando, de reciente formación.

Dispuestas así las modificaciones, el 1° de abril de 1979 el Comandante en Jefe del Ejército Montonero, Mario Eduardo Firmenich, da lectura a la “Proclama del lanzamiento de la Contraofensiva Popular, que salió publicada en “Evita Montonera”, N° 24, de mayo de 1979. El doble agente Firmenich [3] meditó bastante esa suicida misión, pues la hizo coincidir a los 10 años del “Cordobazo”.



Interesante resulta saber que, la comandancia del Ejército Montonero publica desde el tranquilo y salvífico exilio europeo de sus máximos representantes, una Orden General de Campaña, al mejor estilo del Ejército Argentino, en el cual, entre otras medidas, se dispone “la creación de las TROPAS ESPECIALES DE AGITACION (TEA), las que luego, por decisión de la CONDUCCION NACIONAL, se integran como una parte del EJERCITO MONTONERO”. Las TEA tenían como misión difundir, de forma clandestina y por intermedio de Radio Liberación (RL-TV), “informaciones, mensajes, proclamas y/o directivas, cuya emisión ordene el COMANDO ESTRATEGICO”.

El Ejército Montonero, a su vez, tenía grados militares que eran otorgados acorde a la instrucción militar que los soldados montoneros iban superando. Además, dichas tropas se seleccionaban de una minuciosa selección de terroristas procedentes de las colaterales de la Organización Montoneros: JP (Juventud Peronista), JTP (Juventud Trabajadora Peronista), JUP (Juventud Universitaria Peronista), UES (Unión de Estudiantes Secundarios), MVP (Movimiento Villero Peronista), etc.  


Grados militares del Ejército Montonero (irregulares):

Milicianos: efectuaban acciones de sabotaje, propaganda y hostigamiento. Tenían Compañías o Pelotones. Y tenían 2° grado o nivel de Instrucción Militar.

Aspirantes: efectuaban acciones de combate. Tenían o podían conformar Pelotones. Y tenían 3° grado o nivel de Instrucción Militar.


Grados militares del Ejército Montonero (regulares):

Subtenientes (lo fue Julieta Bullrich, hermana de Patricia Bullrich Luro Pueyrredón)
Tenientes (lo fue el poeta y escritor Juan Gelman)

Tenientes Primeros

Capitán (lo fue Rodolfo Galimberti, por ejemplo)

Oficial: Tenía 4° grado o nivel de Instrucción Militar.

Oficial 2°: Tenía 4° grado o nivel de Instrucción Militar.

Oficial 1°: Tenía 4° grado o nivel de Instrucción Militar.

Oficial Mayor: con este grado militar dentro del Ejército Montonero, el terrorista podía ser Miembro del Consejo Superior del Movimiento y Partido Peronista Montonero. Grado o nivel de Instrucción Militar: 4°.

Oficial Superior: con este grado militar dentro del Ejército Montonero, el terrorista podía ser Miembro del Consejo Superior y de la Conducción Nacional del Movimiento y Partido Peronista Montonero. Tenía 4° grado o nivel de Instrucción Militar.

            También contó el Ejército Montonero con su propia Capellanía Militar, a cargo del Padre Jorge Adur, quien aceptó el ofrecimiento el 1° de julio de 1978. Diez días más tarde, el Jefe del Ejército Montonero, Comandante Horacio Mendizábal, enviaba una carta a la Ciudad del Vaticano, informando de este y otras decisiones tomadas por los delincuentes subversivos. La misiva le fue enviada al Secretario de Estado del Vaticano, Su Eminencia Cardenal Jean Villot.[4]

            En una entrevista realizada en París, Francia, Adur se presentó de la siguiente forma: “Soy el padre Jorge Adur. Soy sacerdote y religioso de la congregación francesa de Asunción. Nací en el interior argentino, en la provincia de Entre Ríos. Soy sacerdote y religioso en mi país y al mismo tiempo tuve una tarea pastoral entre los pobres, entre la gente del campo. En estos últimos tiempos trabajé con los obreros, en un barrio del oeste de Buenos Aires. Actualmente soy capellán del Ejército Montonero”.



            Como buen cura infiltrado en el cristianismo, siguió manifestando: “Yo con un marxista no tengo ningún problema. Además creo que el análisis marxista de la realidad es la única herramienta para un análisis profundo…”.[5]

            En 1978, parece que los planteos marxistas habían fracasado como estrategia de la Organización Montoneros de hacerse con el poder en nuestro país, pues los habían alejado del sentir del pueblo argentino que era cristiano desde sus orígenes. Por eso mismo, es bueno rescatar la opinión del subversivo Horacio Mendizábal para entender cómo y por qué un ejército marxista había elegido a un capellán –aunque éste fuera marxista también-: “(El Ejército Montonero) no (…) es (una entidad confesional), por supuesto. Pero es un ejército del pueblo argentino que en consecuencia debe reconocer y respetar la realidad de ese pueblo. Y esa realidad es cristiana. El pueblo argentino tiene una cultura cristiana. El peso de la Iglesia en las masas populares es importante y esto tiene que expresarse también en su Ejército”.



[1] “Estrella Federal”, Órgano oficial del Ejército Montonero, N° 3, 1er. Trimestre 1978, página 8.
[2] “Evita Montonera”, Órgano oficial del Partido Montonero, N° 23, Enero 1979, página 11.
[3] La persona que hizo de enlace entre Mario Firmenich con el Batallón 601 de Inteligencia del Ejército Argentino, fue el general Alberto Alfredo Valín, quien se desempeñó como Jefe del nombrado batallón desde el 11 de octubre de 1974 hasta el 27 de octubre de 1977. El enlace de Firmenich tuvo aceitados contactos con la CIA norteamericana, mayormente a partir de 1980 cuando Valín entrenó y capacitó a numerosos paramilitares argentinos que, en nombre del capitalismo liberal, fueron a reprimir a los movimientos marxistas en El Salvador, Nicaragua y Panamá.
[4] La trascripción íntegra de la carta figura en “Estrella Federal”, N° 5, Edición Especial, de Agosto 1978, páginas 2, 3 y 4.
[5] Op. cit., página 10.